CANNABINOIDES
Cuando leemos o escuchamos hablar sobre el CBD, es probable que no entendamos bien lo que se nos está diciendo. Por ello, es esencial introducir en nuestro vocabulario algún que otro nuevo concepto, como los cannabinoides.
Para empezar, debemos saber que “cannabinoides” es el nombre genérico utilizado para denominar unas sustancias que tienen una estructura molecular determinada y que se encuentran en la planta de cannabis.
Según estudios recientes, la planta de cannabis contiene más de 100 cannabinoides diferentes, siendo los principales el ∆9-tetrahidrocannabinol (∆9-THC), el cannabidiol (CBD) y el cannabinol (CBN).
Una diferencia muy importante y que conviene destacar entre estos cannabinoides es que el primero, el THC (tetrahidrocanabinol), es la sustancia psicoactiva de la planta del cannabis. Entonces, lo que comúnmente se conoce como “marihuana” contiene un elevado nivel de THC. En cambio, el segundo, el CBD (cannabidol), es una sustancia que no es psicoactiva y por lo tanto no “coloca”.
En efecto, estos dos cannabinoides producen efectos antagónicos. Por eso, quien desea consumir THC por su efecto psicoactivo prefiere plantas ricas en THC y bajas en CBD. Por el contrario, quien se interesa por los efectos del CBD usa plantas ricas en CBD con un nivel muy bajo de THC (menos del 0,2%). En la actualidad, en la medida en que se ha desarrollado el cultivo y uso diferenciado de estos cannabinoides (THC y CBD), se sigue utilizando el nombre “marihuana” para denominar las plantas ricas en THC, mientras que se utiliza el nombre “cáñamo” para las plantas ricas en CBD.
A través de procesos altamente cualificados, de la variedad cannabis sativa se obtienen plantas con un alto contenido de CBD y menos del 0,2% de THC. Estas plantas conocidas como cáñamo industrial son diferentes a la planta de marihuana que, como se ha mencionado arriba, contiene un alto grado de THC y muy bajo de CBD. Este proceso comienza con la selección de las semillas y se desarrolla durante todo el proceso de las plantas.
Clasificación de los cannabinoides
Teniendo en cuenta su origen, los cannabinoides se clasifican en tres grandes grupos: fitocannabinoides, endocannabinoides y cannabinoides sintéticos.
- Los fitocannabinoides
Son aquellas sustancias que se producen en la planta de cannabis y de las cuales se han identificado más de 100 tipos, como hemos comentado más arriba.
- Los endocannabinoides
Se trata de las sustancias químicas producidas por el organismo (humano y animal) que se dirigen a los receptores de los cannabinoides que todos tenemos en nuestros cuerpos.
¡Así es! Nuestro organismo también produce cannabinoides. Si bien la planta del cannabis es una gran productora de cannabinoides, conviene saber que su producción no es exclusiva de la misma. Nuestro organismo produce cannabinoides y estos tienen su propio sistema de receptores. Y lo mismo ocurre con los animales. Por eso, tu mascota también tiene su organismo adaptado a la presencia de cannabinoides dentro de su cuerpo.
- Los cannabinoides sintéticos
Son los cannabinoides producidos en el laboratorio para imitar estructural o funcionalmente los fitocannabinoides o los endocannabinoides.
Si queremos consumir THC o CBD, ¿qué nos interesa tener en cuenta?
El principal compuesto psicoactivo de la marihuana y el de mayor potencia es el ∆9 -THC, como se estableció en el estudio realizado por el grupo de Mechoulam, en Israel en 1964. El ∆8-THC tiene un perfil farmacológico muy parecido al del ∆9-THC, aunque sus efectos son más débiles: solo aparece en algunas variedades de la planta y su concentración es pequeña en comparación con la del ∆9-THC.
Según el informe del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA), tanto el contenido en THC del hachís como el de la marihuana no ha parado de crecer desde el 2008. Estas altas cantidades de THC hacen más probable el experimentar efectos desagradables o negativos, de tal manera que, para disminuir riesgos, es importante que los productos consumidos (marihuana, hachís, extracciones, etc.) tengan una proporción adecuada de THC y CBD. Así pues, el cannabidiol (CBD) modula los efectos psicoactivos del THC.
En especial, el CBD puede ayudar a atenuar algunos efectos secundarios y presenta diversos efectos farmacológicos, principalmente como relajante y en la disminución del dolor y la inflamación. Asimismo, ha sido declarado como un componente no adictivo, seguro y con beneficios terapéuticos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¡Estad atentos a los próximos blogs sobre los beneficios terapéuticos del CBD y más!